En algún momento a todos en la escuela nos pusieron la práctica de sembrar una semilla de habichuela en un frasco de vidrio. Nos dieron las instrucciones precisas para que florezca, y en ese momento prestábamos mucha atención para cuidarla y que llegara hacer la planta más bonita de toda el aula, con el propósito de ser recompensados con buenas notas.
Cuando cumplíamos con todas las instrucciones que nos daba el maestro y veíamos que al pasar los días la semilla crecía y echaba sus raíces de una forma tan bonita nos sentíamos orgullosos por el trabajo realizado.
Este ejemplo no está muy lejos de lo que empezamos a sembrar cuando ya estamos conscientes de lo que nos conviene y lo que no en el camino de la vida, de las decisiones que tomamos correctamente y que sabemos que florecerán porque hemos hecho una buena siembra.
Y sabes que estás haciendo una buena siembra cuando no malgastas
tu dinero y te conviertes en un buen administrador, cuando no te dejas llevar
de las tentaciones de comprar solo por desperdiciar el peso.
Hoy es primero de junio, no es tarde para que te propongas hacer
un plan de ahorro y te enfoques en ese sueño de negocio que tanto quieres
lograr. Detente un momento y dedica una hora para que empieces a planificarte
financieramente.
¿De verdad, no estás cansado de que el dinero no te alcance todos
los meses por no saber planificarte? ¿No estás cansado de preguntarte a donde se
te va el dinero y tener que buscar prestado o sobregirar la tarjeta de crédito
para completar?
Aprende a sembrar correctamente, analiza lo que estás haciendo mal
hasta ahora, vuelve y ara la tierra para que plantes la semilla que sí te conviene;
de la mejor manera que lo puedes hacer es leyendo y adquiriendo los conocimientos
de expertos en finanzas personales.
Busca tutoriales, lee libros sobre cómo te puedes desintoxicar de
esas deudas que te agobian y de ese hoyo que se traga tu dinero mes por mes,
para que mañana puedas ver los frutos de tu siembra.
¡Dale valor a tu salud financiera y empieza a cuidar tu bolsillo
hoy!
“Yo dije: planten buenas semillas de justicia, y levantarán una
cosecha de amor. Aren la dura tierra de sus corazones, porque ahora es tiempo de
buscar al Señor para que él venga y haga llover justicia sobre ustedes”. Oseas
10:12.
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